El Hambre

El hambre es un fenómeno que no respeta arroz frió de la nevera, “plátano tra´nochao”, no importa si llueve o hace calor. El hambre no sabe distinguir situaciones, si llega hay que atenderla.  

No le importa que haya dinero para comprar o no. No distingue horarios ni fechas, mucho menos estatus social: A TODOS NOS DA HAMBRE...el hambre no espera, porque si "espera hartura, no es hambre". 

Es inentendible porque te desespera pero con cualquier "chin de algo" se va.

El hambre es importante porque con ella conoces “tu propio yo”; es la mejor consejera matrimonial.

Este fenómeno, natural por cierto, es inconfundible. Sus signos son particulares, primero se extiende por todo el estómago una ligera sensación de vacío que se va haciendo cada vez más dolorosa, al tiempo que el intestino comienza también a producir ruidos extraños.

Todos sabemos cuando llega o está por llegar, incluso los recién nacidos son expertos en avisar cuando tienen hambre.

Todos tenemos una reacción distinta ante el hambre; unos se soban la pansa,  otros, le coge con hablar de manera incoherente y abundante. Muchos, en cambio, guardan silencio....algunos le da por garabatear o escribir, como ami...jejejeje.

Bueno, después continuamos porque de tanto escribir de hambre ya tengo hambre...hasta la próxima....bye!

...hey espera, no te vayas sin un comentario!